El Jueves secuestrado: un país impresentable (VI)

Julio de 2007. La policía recorre todos los quioscos del país para retirar una revista satírica. Repito: julio de 2007, no de 1977. La revista El Jueves ha sido secuestrada por un juez, acusada de injuriar a la corona. Un país impresentable. La libertad de expresión pierde su sentido al existir instituciones intocables. Ecos de un pasado siniestro. Los que apoyan la medida hablan del respeto debido. Un país impresentable. Cuando el humor es salvajemente censurado es que algo falla en los mecanismos del Estado. Las sociedades que persiguen la satirización de sus clases dominantes se encuentran a un paso menos de la barbarie.



Mientras tanto, ciertos medios de comunicación practican el golpismo mediático día sí y día también, sin ninguna consecuencia. Mientras tanto, docenas de programas carroñeros destrozan las vidas de aquellos que consideran patrimonio del gran público, sin ninguna consecuencia.

Julio de 2007. Tengo la revista prohibida en mi poder porque suelo comprarla los miércoles, que es cuando sale. No pienso venderla, por mucho que en eBay ofrezcan ya 100 euros por ella. Tan sólo es una sátira inofensiva. De hecho, El Jueves es mucho más moderado de lo que a algunos de sus lectores nos gustaría. Un país impresentable. Los siervos acatan las decisiones de las clases superiores, que lo son por la nobleza de sangre. La censura domina las calles. ¿Julio de 1707? No, por desgracia estamos en Julio de 2007, en un país impresentable.