El
juez que sigue la causa en Palma de Mallorca estima que la hija de rey
de España, Cristina de Borbón y Grecia, puede haber sido cooperadora
necesaria para el establecimiento de Nóos, en base a ciertos e-mails en
los que Urdangarín solicitaba opinión a su esposa sobre asuntos
relacionados con el proceso judicial abierto. Esta noticia,
sorprendente, implica que la corrupción ha escalado hasta en la familia
real española y en la institución de la jefatura del Estado.Las tentativas para frenar esta medida han comenzado de inmediato. Tanto el fiscal del caso como el de Anticorrupción tratan de evitar la declaración de la infanta el próximo día 27 de abril. Entre los partidos políticos, el PP, muy en su línea de tapar la corrupción y no resolverla, no está de acuerdo con la imputación del juez Castro a un miembro de la casa real española, hecho que demuestra su tendencia a la parcialidad y a la necesidad del continuismo en la más que maltrecha imagen de España a nivel internacional.
En un momento de crisis económica, con 11 millones de personas en riesgo de pobreza o ya en dicha situación, la corrupción salpica tan alto que cualquier institución puede ser afectada por este mal, síntoma de degeneración política, social y moral en todos los niveles habidos y por haber, justo en el momento en el que muchas personas se plantean que sería buena abdicación del rey Juan Carlos en su hijo para restablecer el honor de la institución, o bien el paso a un sistema republicano. ¿Una vuelta a los principios del siglo XX con una monarquía obsoleta con Alfonso XIII, el cual tuvo que salir del país? Esperemos que se aclaren los hechos, sean cuales fueren y que vuelva la normalidad, si es que alguna vez la ha habido.
He aquí el auto de juez Castro,
http://imagenes.publico.es/resources/archivos/2013/4/3/1364996608987Auto-abril-2013-Noos.pdf
Ángel Vilvoord.
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