El parlamento europeo ha decidido dar un premio a la PAH, o plataforma antidesahucios, la cual mediante campañas como la de los escratches a los políticos y peticiones al parlamento, ha puesto en tela de juicio no sólo la legislación hipotecaria, ni la falta de decisiones del gobierno, sino que ha puesto sobre la mesa el dolor de miles de familias que pierden sus casas y que, además, siguen siendo después morosas de por vida.
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La votación del parlamento propone la dación si hay acuerdo entre las partes, así como la renegociación de la deuda para las familias con dificultades económicas, algo que al partido del Sr. Rajoy le pone los pelos de punta ante lo que puede implicar de cara a la crisis financiera de los bancos. Se puede decir que este premio ciudadano y la sutileza de lo decidido por Estrasburgo pone en tela de juicio no sólo el escaso papel de Europa en las desastrosas consecuencias del declive del capitalismo, sino que manifiesta como el partido del gobierno de España es un colectivo de intereses espureos.
Un partido que no escucha no merece gobernar, aunque un sistema corrupto permita que estos señores continúen con su política suicida para el resto de los españoles, pero no para ellos…
ÁNGEL VILVOORD.
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