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miércoles, 16 de enero de 2008

Paraísos fiscales. El fraude capitalista


Las crisis económicas y monetarias tienen una periodicidad predecible y provocada, y muchas veces afectan a las personas más ingenuas y confiadas mientras que las grandes fortunas y especuladores se forran con plusvalías enormes.
Feliciano Robles Blanco (Para Kaos en la Red) [16.01.2008 06:36]
Paraísos fiscales. El fraude capitalista
Feliciano Robles Blanco

Tengo en mi poder un curioso manual sobre instrucciones para invertir en fondos de inversión editado por el banco inglés BARCLAYS donde aconseja como colocar el dinero a las personas que disponen de grandes cantidades o fortunas.

Una de las cosas que me llama la atención de dicho folleto es la clasificación que hace de los países del mundo según su tratamiento fiscal.

Divide al mundo en tres grupos de países bien diferenciados: Los que tienen normas claras de política fiscal,que son los países miembros de la OCDE,que son un total de los 30 países más desarrollados y considera el banco que no son los más adecuados para tener en ellos grandes sumas de dinero, los países que tienen ciertos convenios de política fiscal pero que son poco representativos y estables políticamente los llamados paraísos fiscales que son la auténtica joya para los poseedores de grandes fortunas de dinero.

Nunca hasta ahora, había comprendido la necesidad o lógica de la existencia de países como Anguila, Barbados, Fiji, Granada, islas Caimanes, Emirato de Bahrein,Montserrat, Principado de Mónaco,... y así hasta un totalde 50 diminutos países repartidos por todo el planeta.

Son estos paraísos fiscales un auténtico fraude universal consentido por todos los grandes países y corporaciones para salvaguardar al dinero lucrado del esfuerzo de los trabajadores de todo el mundo, los que se depositan en sociedades fantasmas registradas fiscalmente en estos paraísos para evitar que este dinero no contribuya fiscalmente y sea reinvertido en los países donde se ha originado.

Las enormes cantidades de dinero depositado en estos paraísos fiscales son muchas veces las que desencadenan las crisis monetarias, puesto que están gestionados por gestores que hacen de la especulación y negocios poco convencionales su estrategia para aumentar la rentabilidad del dinero allí depositado, sin ningún tipo de control político o social.

Así los negociantes de armas, drogas, trata de blancas, traficantes de trabajadores, especuladores urbanísticos, deportistas de elite, políticos y funcionarios corruptos,etc, depositan en estos paraísos fiscales sus enormes ganancias, sin que nadie mueva un dedo por su control y contribución a los sistemas fiscales de los países donde se generan sus ingresos.
Hace unos años, se intentó crear una especie de policía mundial para controlar este dinero pero dicha iniciativa duerme el sueño de los justos y por ahora, y ante previsibles crisis monetarias que empobrecerán a muchas personas que creían haberse enriquecido con facilidad aparecerán al rescate las grandes fortunas y podrán lograr enormes beneficios al reinvertir de nuevo en riquezas que se han devaluado de forma interesada.

Las crisis económicas y monetarias tienen una periodicidad predecible y provocada, y muchas veces afectan a las personas más ingenuas y confiadas mientras que las grandes fortunas y especuladores se forran con plusvalías enormes.





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